Por: Dr. Alfredo Sánchez Carballo
Entre las facultades donde se imparte la carrera de
psicología muy poco se discuten ciertas líneas y perspectivas sobre el
comportamiento humano; un ejemplo de lo anterior es la corriente denominada
"psicología de la liber
ación". ¿De qué se trata esta perspectiva? ¿es
un campo de análisis? ¿por qué razón no se toma en consideración en las
escuelas de psicología como si se hace con otras perspectivas dentro de la
disciplina?
Veamos algunas particularidades de este campo: surge a
partir de la década de 1980 en América latina. puede entenderse como parte de
un proyecto más amplio de teoría y práctica liberadora que surgió en el
contexto del trabajo para y con poblaciones oprimidas/subalternas en toda
América latina. Sus principales representantes son Enrique Dussel, Martín Baró,
Langer, Montero, Dobles, Cordero, González Rey, entre otros.
Esta perspectiva podría considerarse como una con carácter
autónomo o de una ubicación teórica al margen de las teorías o perspectivas
psicosociales dominantes. Tal como lo enmarca Burton (2004), la crisis de la
psicología social europea y norteamericana dio pauta para iniciar una
psicología social para latinoamerica con el adherido de “liberación”. Las características
para este nacimiento disciplinar fueron:
1.
La falta de relevancia social. La
psicología social no parecía estar produciendo conocimiento dirigido a los
problemas sociales, ni en las sociedades en que se desarrollaba, ni en otros
lugares.
2.
Un contexto de descubrimiento localista,
combinado con una pretensión de validez universal. La psicología social
dependía de investigaciones con poblaciones selectivas en escenarios
artificiales (especialmente con estudiantes de licenciatura en experimentos
formales). No obstante, intentaba sugerir principios generales de la psicología
social que pudieran aplicarse a cualquier ser humano en todo contexto.
3.
La imitación de la neutralidad científica
significó una negación de la dimensión moral: Los psicólogos sociales
comienzan a sentir un intenso malestar en relación con las condiciones en que
realizan su trabajo, en relación con las orientaciones que lo inspiran y, sobre
todo, en relación con su utilidad y efectos.
En muchos casos, responder a la pregunta de
¿qué utilidad real tiene la psicología social para los grupos oprimidos? es un
proceso complicado dada la naturaleza de la psicología como un paradigma que
atiende los malestares de la cotidianeidad que produce el sistema capitalista
neoliberal patriarcal. Por eso, tal vez, en las facultades de psicología no
cabe la posibilidad de invertir tiempo en discusiones que solo aseguran una complejización
de la realidad de por sí ya compleja.
La psicología de la liberación, entonces, es
un “programa” para dar solución a los problemas de los grupos populares,
marginadas y sin una participación en las democracias insipientes. Todo esto
encaminado no solo a la búsqueda del bienestar individual a partir del
afrontamiento “divanesco” de los malestares psicológicos, sino una búsqueda para
la justicia social emancipatoria, política, emocional y económica.
En resumen, la psicología de la liberación
es una psicología no individualista, para las personas desposeídas y expulsadas
a los márgenes por parte de un sistema capitalista y con un amplio sentido de
compromiso concientizador y humano que se alcanza por medio del diálogo para
identificar los mecanismos que les oprimen.
Por ahora, solo esta pequeña entrada a un
mundo fascinantes en que las y los psicólogos podríamos invertir esfuerzos de
intervención para construir una sociedad más justa.
Burton, Mark. La psicología de la liberación: aprendiendo de América Latina Polis: Investigación y Análisis Sociopolítico y Psicosocial, vol. 1, núm. 4, noviembre, 2004, pp. 101-124
La psicología de la liberación es una perspectiva que surge como respuesta a la falta de relevancia social percibida en la psicología social dominante. Su enfoque se diferencia al cuestionar la neutralidad científica y promover una mirada crítica hacia el sistema capitalista patriarcal. Sin embargo, su falta de inclusión en los currículos de las facultades de psicología podría indicar una resistencia a discutir perspectivas o que requieren una compleja reevaluación de la realidad social.
ResponderBorrarEste texto destaca la importancia de la psicología de la liberación como un enfoque comprometido con la justicia social y la emancipación de los grupos marginados. Critica la falta de relevancia social de la psicología convencional y aboga por una perspectiva más comprometida y transformadora. Es fundamental abrir espacios para discutir y explorar este enfoque en el ámbito académico de la psicología.
ResponderBorrarla importancia de la psicología de la liberación como un programa destinado a abordar los problemas de los grupos marginados y excluidos en sociedades con democracias incipientes. Se resalta que este enfoque no se limita a la atención individual de malestares psicológicos sino que busca la justicia social en todos los ámbitos político, emocional y económico. Además dice que la necesidad de un compromiso conscientizador y humano para identificar y enfrentar los mecanismos opresivos del sistema capitalista.invitan a los psicólogos a dirigir sus esfuerzos hacia la construcción de una sociedad más justa a través de la intervención psicológica desde una perspectiva colectiva y comprometida.
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